jueves, 18 de enero de 2007

Decrepitud

Este es el aspecto del pobre Crispín al final del día de hoy...

Entre la humedad y que lo empiezo a odiar, está cada vez más decrépito.

¡¡¡Parecezco de la inclusera!!!

Venderán flequillos postizos para estos casos? Tengo que mirar en H&M, siempre tienen las cosas más surrealistas en cuestión de postizos capilares.

martes, 16 de enero de 2007

El inicio

Todo empezó hace 4 años, cuando en un rapto de premenstrualidad, me corté el flequillo por primera vez... No era consciente de que acababa de crear un monstruo.

Como nunca me acababa de convencer, cada día me lo me lo cortaba un poquito más, hasta que acabé como una auténtica cacatúa sin pizca de glamour... Para más tragedia, mi pelo afro ni siquiera había conocido el alisado japonés de eBay!!!

Desde entonces, más largo o más corto, más o menos cacatúa, mi flequillo se resiste a desaparecer, controlando mi voluntad!

Hace unas tres semanas, me corté un flequillo Crispín (según mi hermana), que poco a poco, se ha convertido en una especie de peluquín a lo Babe, el cerdito valiente. Cómo? No lo sé!!! Un día, de repente, estaba con las tijeras en la mano y el lavabo lleno de pelos, y ya era demasiado tarde.

Ahora estoy esperando a que me crezca, y cuando no lo soporto más, me pongo una horquilla.

Por si fuera poco, en el último alisado japo se me quemó un poco y está en un estado bastante lamentable, por más caros que sean los productos regeneradores que uso...

Y esto es lo que hago para desconectar al volver del trabajo, temo por mi salud mental.